Bancaja presenta en Valencia la exposición Por laberintos, coproducida junto al Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB). La muestra, con guión de Ramon Espelt, comisariada y diseñada por Oscar Tusquets y con el asesoramiento de Jorge Wagensberg, realiza un repaso del concepto y la representación del laberinto a lo largo de la historia –haciendo una clara distinción entre laberintos de recorrido único, unicursales (Labyrinths), y de recorrido múltiple, multicursales (Mazes)+, y reflexiona acerca de la vigencia de este elemento y acerca de las diferentes prácticas y usos más actuales. Esta recreación y reflexión artística en torno al laberinto se realiza a través de un montaje especialmente interactivo y en el que están presentes 21 artistas e intelectuales como Jorge Luis Borges, Friedrich Dürrenmatt, Umberto Eco, Robert Morris, Lika Mutal, Terry Fox o Martha Graham. La muestra permanecerá en el Centro Cultural Bancaja de Valencia entre el 3 de febrero y el 29 de mayo de 2011, tras su paso por la sede del CCCB en Barcelona.

La exposición, que ocupa todo el espacio expositivo del Centro Cultural Bancaja de Valencia (Sala Sorolla y Sala Picasso), plantea espacios muy diferenciados que se ilustran con obras de diferentes procedencias y formatos, autores y épocas, como, por ejemplo, piezas arqueológicas, grabados, fotografías, planos, proyecciones o maquetas, aparte de piezas – audiovisuales, animaciones, interactivos– creadas expresamente para la muestra. Con ocasión de la coproducción de Por laberintos, se ha editado un catálogo, que incluye textos de Umberto Eco, Ramón Espelt, Oscar Tusquets y Jorge Wagensberg, junto a una antología de citas literarias de Núria

Aidelman y Laia Colell (A Bao A Qu), y una selección de las obras presentadas en la exposición, que invita a dar un paseo por los laberintos de recorrido único y múltiple. La muestra es fruto de la colaboración iniciada por Bancaja con el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona en 2004 y que, desde entonces, ha permitido cooperar en el desarrollo de casi una decena de exposiciones con títulos como El salvaje europeo, Occidente visto desde Oriente, o En la ciudad china. La vertiente didáctica y social está también presente en la exposición con la programación de talleres didácticos. Coincidiendo con la presentación de Por laberintos en el Centro Cultural Bancaja de Valencia, se ha programado un Taller de Arte para personas mayores de 55 años, que gira en torno a esta muestra, permitiendo potenciar su memoria y orientación. El taller acerca a los mayores la imagen del laberinto, recreada a partir de elementos vegetales para crear la ilusión de una arquitectura viva. Los asistentes manejan técnicas como el dibujo y la creación de maquetas, y crean sus propios laberintos con musgo como elemento decorativo. El taller, de carácter gratuito, se desarrolla desde el 4 de febrero hasta el 30 de junio de 2011. Las personas interesadas pueden informarse y reservar asistencia en el teléfono 963.813.993.

Además, se ha programado un taller didáctico para escolares y jóvenes (de 3 a 18 años), que constituirá un estímulo a la participación, y abrirá puertas a la reflexión y a la vivencia artística entre los más jóvenes. Este taller se ofrecerá de lunes a viernes, en horario de mañana, durante la vigencia de la exposición. Las reservas de asistencia pueden realizarse en el correo electrónico: porlaberintos@fundacionbancaja.es La exposición, de entrada gratuita, puede visitarse todos los días (incluidos domingos y festivos) de 9 a 21 horas ininterrumpidamente. Más información en la web www.bancaja/obrasocial.es

Apartados de la exposición
El laberinto como construcción y símbolo está presente en muchas tradiciones culturales de la humanidad y, tal y como señala Eco –autor del prólogo del catálogo de la exposición–, la historia milenaria de este elemento revela la fascinación que siempre ha despertado en el hombre porque, de algún modo, le habla de la condición humana: existen infinitas
situaciones en las que es fácil entrar pero de las que es difícil salir.

Laberintos unicursales
El recorrido es intricado pero único, de acuerdo con la pretensión de los laberintos unicursales: máximo recorrido en una superficie dada. Se realiza una primera distinción entre laberintos conceptuales, grafiados en la piedra o sobre el papel, que podemos recorrer con el ojo o con un dedo, y laberintos en los que entramos físicamente y podemos recorrer andando. Se presentan grabados sobre piedra, el laberinto cretense representado en monedas y cerámica griega, mosaicos romanos, laberintos de catedrales góticas, laberintos como memoriales, así como facsímiles de manuscritos medievales y varios libros del siglo XVI al XIX que contienen la representación del laberinto. Se muestra asimismo obra de artistas contemporáneos –Robert Morris, Richard Long…–, que tienen los laberintos históricos como fuente de inspiración y que llevan la representación del laberinto unicursal hasta nuestros días. Este espacio desemboca en una sala destinada al minotauro y a la relación del laberinto con la danza.

Crisis del concepto del laberinto unicursal
En este apartado se analizan cuestiones como la inutilidad del hilo de Ariadna en el caso de los laberintos unicursales. Se presta especial atención a Giovanni Fontana (siglo xv) autor de los primeros laberintos multicursales conscientemente representados como tales, con la libertad de elegir el camino en varios cruces y con la posibilidad de perderse tras llegar a varios culs de sac. El laberinto multicursal plantea el problema de la necesidad del hilo de Ariadna para salir de él. El hilo de Ariadna como “memoria externa” que nos ayuda a reconstruir los pasos que nos devuelven a la entrada del laberinto: se dedica una sala a la relación entre laberinto y memoria, con un hormiguero como pieza central que permite una aproximación al tema desde la perspectiva de las ciencias de la naturaleza.

Laberintos multicursales
El recorrido en este espacio no es único, sino repleto de alternativas, posibilidades de elección y culs de sac, con paredes más altas que la altura de la vista, a diferencia del espacio unicursal en el que el mobiliario expositivo es más bajo. La entrada en este espacio se centra en los laberintos vegetales que figuran en numerosos jardines de la aristocracia europea de los siglos XVI al XVIII. El recorrido se bifurca en varias salas en que se desarrollan temáticas vinculadas a espacios concretos –el laberinto de Versalles– o autores (escritores, arquitectos, artistas: Borges, Randoll Coate, Patrick Ireland, Michael Ayrton, Friedrich Dürrenmatt, Saul Steinberg…) para quienes el laberinto ha sido un tema importante en su obra. En este espacio nos encontramos, asimismo, con un laberinto de espejos transitable y con una sala con una instalación audiovisual que
recoge la presencia del laberinto como espacio vivido en el cine.

Del 3 de febrero al 29 de mayo de 2011
Comisarios: Oscar Tusquets Blanca y Ramon Espelt

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