Jorge Fernández Gonzalo (Madrid, 1982) ha resultado ganador del III Premio de Investigación y Ensayo sobre Aplicaciones Terapéuticas del Arte convocado por la Fundación María José Jove con su ensayo “La rebelión de Artaud. Arte, locura y terapia”.

Dotado con 6.000 euros y la publicación del ensayo, esta convocatoria de la Fundación María José Jove tiene como principal objetivo fomentar el pensamiento contemporáneo y su confluencia interdisciplinar, con el fin de contribuir al estudio, divulgación y praxis del arte como herramienta terapéutica.

“La rebelión de Artaud. Arte, locura y terapia” se basa en la vida del poeta, actor, dibujante y director francés Antonin Artaud (1896-1948), así como en las implicaciones entre su proyecto artístico y las instituciones médicas que encontró durante su camino. Para el autor: “este ensayo es una aproximación al «caso Artaud» con la que pretendo, no solo, dar a conocer la obra o el historial clínico del escritor, sino atender a las respuestas (y preguntas) que una mirada terapéutica a través del arte pueda suscitar sobre su figura”.
El jurado ha valorado su originalidad; análisis y relación interdisciplinar; la claridad de exposición, innovación y articulación; el carácter histórico, así como la calidad literaria y su interés divulgativo sobre la relevante figura de Artaud en relación a sus modos para sobrellevar la enfermedad, la canalización a través de los cauces estéticos del surrealismo y, por último, el trabajo dirigido para la mejora y aceptación.

Ensayo ganador

En palabras de Jorge Fernández Gonzalo: “el ensayo reproduce un viaje, el viaje a la locura iniciado por Antonin Artaud. En ese difícil encuentro, el de la locura creativa del artista y las diferentes intervenciones terapéuticas, será el primero quien ponga en tensión los límites de la praxis médica de su tiempo.

Imposible pensar a Artaud fuera de su enfermedad: el escritor padeció a lo largo de su vida varias crisis depresivas, episodios de paranoia y delirios alucinatorios, acompañados de fuertes dolores y ofuscación, por lo que sería internado en distintas instituciones mentales durante largos periodos de tiempo, en las cuales llegó a padecer las más abominables técnicas de corrección clínica que conoció el siglo pasado, con descargas eléctricas, privación de libertad y suministro de fármacos de todo tipo, entre otras vejaciones médicas que despertarían la ira de sus escritos. Si algo nos enseña la rebelión de Artaud es que el loco tiene mucho que decir ante cualquier intento por domesticarlo, transformarlo o reconducirlo por el camino de la cordura. En ese margen de resistencia, ante este (des)encuentro entre el arte artaudiano y la terapia, esta obra trata de comprender, dar voz y relato al genio abrumado por el dolor y la enfermedad que fue Antonin Artaud.

Con vistas a poder dilucidar el viaje artaudiano por los abismos de la sinrazón, nuestro trabajo se divide en cuatro bloques, a través de los cuales nos sumergiremos en los diferentes aspectos que determinan la conexión entre arte y locura que atraviesa toda la trayectoria del autor. El primero de estos apartados supone un recorrido biográfico por el periplo vital de Artaud, en donde ponemos de relieve la vinculación entre la locura y su genialidad creativa y los hitos que consideramos esenciales para comprender sus creaciones. Los siguientes capítulos constituyen aproximaciones a aspectos concretos de su producción artístico-literaria: dedicamos un capítulo a hablar de su obra literaria (no desde una perspectiva filológica, sino crítico-clínica), otro para entender el pensamiento teatral artaudiano y, posteriormente, un último bloque en relación a los dibujos del artista durante sus años finales”.

El autor

Jorge Fernández Gonzalo (1982). Doctor en Filología Hispánica por la UCM y en Filosofía por la UAM, es autor de varios poemarios, por los que ha obtenido premios como el Joaquín Benito de Lucas y el premio Hiperión de poesía joven. En su trayectoria como ensayista, ha publicado una docena de libros, entre ellos “Filosofía zombi” (Finalista del premio Anagrama, 2011), “Homo Public” (Premio Fray Luis de León 2014), “Iconomaquia. Imágenes de Guerra” (Premio Málaga de Ensayo 2016) y “La resta risible” (Premio Valencia de ensayo 2019). Ha traducido las poesías de Rimbaud y Baudelaire, así como textos de los filósofos Donna Haraway y Quentin Meillassoux. Actualmente es profesor de filosofía en la Universidad Complutense de Madrid.

El jurado

El jurado del Premio está integrado por Ángel Cagigas Balcaza, profesor en Psicología en la Universidad de Jaén y docente en el Máster de Arteterapia y Aplicaciones del Arte para el Diálogo y la Integración Social de la Universidad Pablo Olavide y en el Máster en Investigación y Educación Estética: Artes, Música y Diseño de la Universidad de Jaén; Ana Hernández Merino, doctora en Bellas Artes, arteterapeuta y codirectora del Máster en Arteterapia UPV; Belén Sola Pizarro, licenciada en Bellas Artes y doctora en Educación, investigadora y, entre las prácticas artísticas contemporáneas, la etnografía experimental y las pedagogías críticas; por la presidenta de la Fundación, Felipa Jove y por la directora de la Colección de Arte Fundación María José Jove, investigadora y comisaria independiente Susana González.

Arte como herramienta de inclusión

La Fundación María José Jove, desde su constitución en 2003, ha entendido el arte como una de las mejores herramientas para la inclusión y la transformación social. Este compromiso social se ha ido materializado a través de múltiples programas didácticos relacionados con su Colección de arte, estableciendo un excelente canal de comunicación recíproca entre niños, jóvenes y colectivos en riesgo de exclusión y vulnerabilidad, prestando atención a diferentes necesidades sociales, facilitando el acceso a la educación y la cultura, y ofreciendo alternativas de expresión a través del arte.

Estas acciones han contribuido a generar espacios que propicien el desarrollo de sus habilidades comunicativas y relacionales, el desarrollo de la sensibilidad, el refuerzo de sus habilidades cognitivas y la potenciación de la convivencia, además de su visualización.

Artículo anteriorPiezas arqueológicas de excepción en el 45 Aniversario de Feriarte
Artículo siguienteObras emblemáticas de la colección Frick se expondrán en el Prado