El Rey Felipe VI y el Presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, han visitado, acompañados del ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, la exposición ‘Pessoa: todo arte es una forma de literatura’, en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía. Guiados por los comisarios, Ana Ara y João Fernandes, han recorrido esta muestra acerca de la escena vanguardista portuguesa de la primera mitad del siglo XX.

Vertebrada a través de las corrientes que estableció el poeta luso, ‘Pessoa: todo arte es una forma de literatura’ incluye más de 160 obras de artistas como José Almada de Negreiros, Amadeo Souza-Cardoso o el matrimonio Delaunay, procedentes de diversas colecciones privadas y de instituciones como la Fundación Calouste Gulbekian, la Biblioteca Nacional de Portugal o el Centro Pompidou, entre otras.

Las reflexiones y poemas de Fernando Pessoa son el hilo conductor de este relato sobre la poco conocida escena vanguardista portuguesa (1914-1936), que dedica también una especial atención a las revistas publicadas durante este periodo, como A Águia, Orpheu, K4 O Quadrado Azul, Portugal Futurista o presença, en las que aparecieron algunos de los textos de Pessoa y que actuaron como caja de resonancia de estas ideas de vanguardia, ejerciendo una gran influencia estética e ideológica en la intelectualidad portuguesa de la primera mitad del siglo XX.

La exposición Pessoa. Todo arte es una forma de literatura toma su título de una cita de Álvaro de Campos, uno de los heterónimos más vanguardistas de Fernando Pessoa (Lisboa, 1888-1935), publicada en la influyente revista portuguesa presença.

A través de la prolífica producción textual de sus más de cien heterónimos, Pessoa creó una vanguardia propia y se convirtió en intérprete de excepción de la crisis del sujeto moderno y de sus certezas, trasladando a su obra una otredad múltiple que achacó a su desorientación existencial.

Paulismo, Interseccionismo o Sensacionismo son algunos de los términos acuñados por el poeta en sus numerosos textos y que vertebran la especificidad de la modernidad portuguesa. Esta exposición recurre a esos ismos para articular un relato visual de esta escena lusa, reuniendo para ello una selección de obras de José de Almada Negreiros, Amadeo de Souza-Cardoso, Eduardo Viana, Sarah Affonso o Júlio, entre otros, relacionadas con las principales corrientes estéticas portuguesas desde comienzos del siglo XX hasta 1935. Dichas corrientes acusaron la inevitable influencia de las tendencias europeas dominantes, pero trataron sin embargo de distanciarse de ellas. Distintos escritos de Pessoa dan cuenta del lugar particular de estos ismos de su cosecha, así como de su carácter distintivo dentro del contexto europeo con alusiones explícitas, por ejemplo, a las diferencias entre el Futurismo y el Interseccionismo. Por otro lado, varias de estas obras reflejan un gusto por lo popular y la idiosincrasia lusa que aparece tanto en el trabajo de los artistas portugueses que viajaron a París, como en el de los extranjeros que decidieron pasar una temporada en tierras portuguesas, caso de Sonia y Robert Delaunay.

La muestra dedica también una especial atención a las revistas publicadas durante este periodo, como A Águia, Orpheu, K4 O Quadrado Azul, Portugal Futurista o presença, en las que aparecieron algunos de los textos de Pessoa y que actuaron como caja de resonancia de estas ideas de vanguardia, ejerciendo una gran influencia estética e ideológica en la intelectualidad portuguesa de la primera mitad del siglo XX

La exposición ‘Pessoa: todo arte es una forma de literatura’ permanecerá abierta hasta el 7 de mayo.

Artículo anteriorMáster PhtoEspaña en fotografía
Artículo siguienteMadrid quiere ser una ciudad de cine