PicassoLa Comunidad de Madrid continúa las celebraciones del 30 aniversario del Museo Picasso-Colección Eugenio Arias, con una nueva exposición. Picasso y el Quijote. Un mar de historias muestra, hasta el 24 de junio, un conjunto de grabados de la Suite 347 de Picasso con escenas cervantinas, pertenecientes a la colección de la Fundación Bancaja, y una selección de obras pertenecientes a la colección permanente del museo. Esta exposición se une a la celebración del IV Centenario de la publicación de la segunda parte del Quijote (2015) y explora su estela en la cultura contemporánea.

A diferencia de lo que suele pensarse, el Quijote no fue objeto de gran atención, ni un motivo recurrente en la trayectoria de Picasso. A pesar de esto, ya en los primeros años de su trabajo, enmarcados dentro de su formación artística, realizará dos dibujos sobre distintas escenas del Quijote, algunas tan personales y tan frescas, como la que muestra a los dos protagonistas de la obra navegando sobre un río.

Posteriormente, volverá al tema en una postal dirigida a Apollinaire en 1907 y, no será hasta 1937, en el contexto de la Guerra Civil española y en el redescubrimiento de las obras de Cervantes como La Numancia que tanto influyeron en la concepción del Guernica, cuando realice una serie de estampas que incidirán en una imagen heroica, icono de resistencia, alejada de los tópicos y de la imagen estereotipada del personaje. A partir de los años 50, coincidiendo con su madurez artística, abordara el tema en más ocasiones. En 1955 realiza la obra cumbre que ha codificado la imagen picassiana de este asunto, el boceto para el cartel de las letras francesas realizado con motivo de la celebración del 350 aniversario de la publicación del Quijote.

Una edición de este cartel de 1960, junto con la bacía decorada con motivos quijotescos realizada en Vallauris en 1959, son las piezas clave que conserva el Museo Picasso-Colección Eugenio Arias sobre este tema, a los que se suman ahora cinco grabados de la Suite 347 realizados en 1968 y que constituyen sus últimos trabajos sobre este motivo, marcados por su peculiar forma de aproximación al tema cervantino, lleno de metamorfosis, simplificaciones, pero siempre con una mirada fresca y nueva de uno de los iconos de la literatura universal.

Los grabados pertenecen a la colección de la Fundación Bancaja, que posee una importantísima colección de obra gráfica de Picasso, expuesta en España y fuera de nuestras fronteras. Los visitantes tendrán la oportunidad de contemplar en el Museo Picasso- Colección Arias de Buitrago del Lozoya el diálogo que establecen estos grabados con las interpretaciones iconográficas cervantinas del propio museo.

Año de celebraciones

fachadamuseoAdemás de la exposición, el Museo Picasso –Colección Eugenio Arias ha querido celebrar el 30º aniversario de su creación con otras dos iniciativas: una muestra sobre Picasso y el teatro y el programa expositivo ‘La pieza invitada’.

La exposición Picasso y el teatro. El sombrero de tres picos, comisariada por Andrés Peláez, director del Museo Nacional del Teatro de Almagro, muestra los fondos picassianos propiedad de la Comunidad de Madrid y depositados en este museo: los trajes y figurines con diseños de Picasso para el ballet El sombrero de tres picos, junto a otros documentos que posee el Museo Nacional del Teatro: carteles, dibujos y programas de mano.

Por su parte, el programa expositivo ‘La pieza invitada’ tiene como objetivo acercar al público obras cedidas por otras instituciones dedicadas al artista y que en el museo adquieren un nuevo significado, al ser presentadas en el contexto de la exposición permanente. La iniciativa comenzó el pasado 14 de enero con la obra Corrida de toros, procedente del Museu Picasso de Barcelona. Esta pieza cerámica pertenece a una serie de obras que Pablo Picasso realizó en el sur de Francia entre 1947 y 1948 y que muestra la imagen de un picador a caballo y a un torero con su capote, con trazos simples y colores puros: negro y rojo sobre fondo rosado.

AriasLa siguiente pieza invitada se puede ver ya en el Museo desde el 31 de marzo para quedarse hasta el 28 de junio, Paissage de Vallauris, que pertenece a la Fundación Picasso. Museo Casa Natal de Málaga, es un grabado litográfico realizado en París en 1953. Picasso realizó su primera litografía en 1919, pero no fue hasta 1945 cuando se interesó realmente por este sistema de estampación, en el taller de Fernand Mourlot, en París, donde se realizó esta pieza invitada. Allí utilizó todo tipo de planchas, como piedra o zinc, y probó numerosas técnicas, como el lápiz, pluma o aguada. La obra está realizada mediante lápiz litográfico sobre zinc, y representa un paisaje de Vallauris, localidad del Sur de Francia donde coincidieron Picasso y Eugenio Arias.

Del 30 de junio al 30 de septiembre el Museo de Buitrago de Lozoya volverá a acoger una obra del Museo Picasso de Barcelona y del 2 de octubre al 27 de diciembre será el turno de la litografía Francoise sobre fondo gris, de nuevo cedida por el Fundación Picasso.

El horario de esta exposición del museo es de martes a viernes, de 11:00 a 13:45 y de 16:00 a 18:00. Sábados, de 10:00 a 14:00 y de 16:00 a 19:00 y domingos y festivos de 10:00 a 14:00. Se puede consultar más información en www.madrid.org/museopicasso.

Artículo anteriorEducación destina 24 millones de euros para los Erasmus del curso 2015-2016
Artículo siguienteLas dos Reinas entregaron los Premios Reina Sofía 2014 del Real Patronato sobre Discapacidad