Imagen_Expo_Cuarzo_web (1)El Museo Geominero inaugura una exposición temporal y monográfica sobre el cuarzo, con nueve vitrinas y diez paneles. A través de sus formas, sus colores y su génesis, la exposición permite entender, distinguir y admirar a este extraordinario mineral.

Las ideas básicas sobre la abundancia y naturaleza del cuarzo, introducen al visitante en un sorprendente mundo cristalino. Los primeros ejemplares expuestos ilustran sobre las formas naturales más habituales de este mineral. Así, las rocas ígneas, sedimentarias o metamórficas que contienen cuarzo, transmiten la imagen más común de esta especie, tan diferente de los espectaculares cristales conservados en los museos.

El aspecto del cuarzo es extremadamente variable, lo que dificulta su identificación. Para reconocerlo, la exposición propone tres aspectos en clave de propiedades físicas: la morfología, el tamaño y el color de los cristales. Los rasgos geométricos típicos del cuarzo se aprecian nítidamente en los grandes cristales pero, en otros especímenes, los cristales son tan pequeños que sólo pueden verse con técnicas microscópicas. Es tal la diversidad de colores, que resulta muy común la confusión del cuarzo con otros minerales. Por eso, la extensa gama de cuarzos coloreados de la exposición proporciona al visitante las principales claves para entender esta compleja realidad cromática.

museo2PEspectaculares gemas
Materia prima para la obtención de gemas, algunos cuarzos transparentes, bellamente coloreados o con sugerentes inclusiones, se han pulido desde tiempos inmemoriales. Cristal de roca, amatista, ágata y jaspe, son algunas de las espectaculares gemas de la exposición, situadas junto al material en bruto del que proceden.

El hombre primitivo, hábil tallador de herramientas, fue el primero en aprovechar las propiedades físicas del cuarzo, abriendo así el camino al moderno ingeniero que utiliza este mineral para fabricar la más avanzada tecnología. Resultan asombrosas las herramientas primitivas de cuarzo (sílex o cuarcita), fabricadas por nuestros predecesores con un claro conocimiento de la manera de romper del material.

Actualmente, las propiedades físicas que se aprovechan son mucho más sofisticadas como por ejemplo la piezoelectricidad, indispensable para fabricar instrumentos científicos y relojes de cuarzo. Con los objetos expuestos es posible apreciar el fuerte contraste entre las antiguas herramientas manufacturadas y las complejas aplicaciones contemporáneas.

Uso espiritual y científico
Otros usos del cuarzo no son tan materiales y de hecho se sitúan dentro del plano puramente espiritual. La falta de conocimiento científico en el pasado, hizo que se le atribuyeran propiedades mágicas y curativas al cuarzo. Estas creencias, claramente falsas y sin base científica alguna, han tenido un notable resurgimiento en las últimas décadas, sobre todo dentro de los conocidos ámbitos “esotéricos”.

Imagen_Expo_Cuarzo_webEl nuestro es un país rico en cuarzo. Por este motivo, la cuidada selección de ejemplares, es fiel reflejo de los principales yacimientos españoles, situados tanto en rocas ígneas, como metamórficas o sedimentarias.

No faltan en la exposición cristales tan emblemáticos como el Jacinto de Compostela del sureste peninsular o una muestra de los conocidos “diamantes de San Isidro”, recuperada durante el siglo pasado dentro del actual casco urbano de Madrid.

El Instituto Geológico y Minero de España (IGME) tiene como misión principal proporcionar a la Administración General del Estado y de las Comunidades Autónomas que lo soliciten, y a la sociedad en general, el conocimiento y la información precisa en relación con las Ciencias y Tecnologías de la Tierra para cualquier actuación sobre el territorio.

Una mirada a través del cuarzo
Hasta junio
Museo Geominero del Instituto Geológico y Minero de España
Calle Ríos Rosas, 23, Madrid
Entrada gratuita

 

Artículo anteriorEl Museo Nacional de Arte de Cataluña será gratuito los sábados por la tarde
Artículo siguienteLa Virgen de la Granada de Fra Angelico