- Revista de Arte – Logopress - https://www.revistadearte.com -

«San Juan Bautista en el desierto» de José de Ribera

San Juan Bautista en el desierto. José de Ribera. Siglo XVII. Óleo sobre lienzo.  Ayuntamiento de Valladolid.

San Juan Bautista se retiró al desierto en donde comenzó a predicar y a bautizar en torno al año decimoquinto del imperio del emperador Tiberio, cuando Poncio Pilato gobernaba Judea, y Herodes era tetrarca de Galilea. Su vida ascética, donde los evangelistas Mateo y Lucas indican que vestía una piel de camello y se alimentaba exclusivamente de langostas y miel, le convierten en el primer antecesor de la vida eremítica del Cristianismo. Como santo apartado de los placeres mundanos, su vida fue representada continuamente en el arte, si bien tuvo una especial importancia en el Barroco, al calor de la Contrarreforma católica.

El lienzo,representa a San Juan en edad juvenil. En el lado inferior izquierdo aparece la cabeza del Agnus Dei, en relación con el hecho de que un día, cuando Jesús pasaba a lo lejos, Juan le señaló y clamó: He ahí el Cordero de Dios. En el lado superior derecho se observa un escueto paisaje.

El cuadro, atribuido a José de Ribera, fue ejecutado en una fecha cercana a 1635-1640.

Esta obra de José de Ribera se puede ver en la exposición Monacatus que se desarrolla en la archidiócesis de Burgos, en el Monasterio de San Salvador en Oña (Burgos). La iglesia del monasterio, que contiene el panteón de los reyes, infantes y condes de Castilla y de Navarra, junto al claustro y otras dependencias como la sacristía y la antigua sala capitular, avalan desde el siglo XI su antiguo y fecundo esplendor religioso. La exposición se puede visitar hasta el 4 de noviembre de 2012.

En el año 1011, Sancho García, tercer conde de Castilla, y nieto de Fernán González, fundó el monasterio benedictino de San Salvador, en Oña (Burgos). La celebración de su milenario ha motivado que la Fundación Las Edades del Hombre haya elegido esta localidad emblemática como sede de la decimoséptima edición de sus exposiciones. Y, dado que el lugar de la muestra es el citado monasterio, ha decidido dedicarla en esta ocasión a un tema apropiado, a la vez que sugerente: la vida monástica en la Iglesia Católica.

La exposición lleva por título Monacatus, transcripción fonética de “monachatus”, término tomado del latín “monachus”, y que a su vez deriva del griego “μοναχóς”, cuyo significado es “solitario”. Con esta palabra se ha querido expresar y condensar la realidad histórica del monacato en la Iglesia Católica en el territorio de Castilla y León, y en los diversos carismas de vida consagrada monástica, un don del Espíritu Santo para la comunidad eclesial y para la sociedad humana de ayer y de hoy.

Como en otras ocasiones, el relato de la muestra se desarrolla a través de diversos capítulos, a través de los cuales se intentan abordar los temas más destacados de una realidad compleja, que se muestra en su naturaleza y en su apariencia como una forma, entre otras, de vida cristiana.

En uno de los capítulos titulado «Retirados del siglo» se explica el comisario de la muestra  el sacerdote burgalés Agustín Lázaro López, que siguiendo el mandato de Jesús de renuncia de uno mismo y de tomar la cruz para seguirle, hubo personas, hombres y mujeres, que decidieron separarse del estilo de vida común, distanciarse de los centros habitados, y retirarse a la soledad del desierto. Buscaron entregarse al servicio divino, a la soledad como expresión de su vida cristiana, al ascetismo como medio de purificación y de crecimiento espiritual, a la renuncia a todo, al trabajo manual, a la oración y a la lectio divina. De este modo surgió el monacato en su expresión primera, el anacoretismo, convirtiéndose en su Regla por antonomasia la vida de San Antonio abad.

Posteriormente, San Pacomio descubrió el valor del amor fraterno y de la vida comunitaria, propugnando la constitución de comunidades estructuradas y numerosas que se dedicaron al trabajo, la oración, el ayuno y las conferencias espirituales. Es la otra modalidad del monacato, el cenobitismo.

Finalmente, San Benito de Nursia llevó a su punto culminante esta apasionante aventura eclesial en Occidente con la implantación de una Regla que se impuso a casi todas las demás, insistiendo en la pobreza, la castidad, la obediencia, la humildad, el silencio, la oración litúrgica, el trabajo manual e intelectual y la meditación de la Sagrada Escritura.

Más información sobre Monacatus:
MONACATUS. La vida consagrada en la Iglesia Católica
Códices expuestos en el Monasterio de San Salvador en Oña (Burgos)
“Anunciación” de Pedro Berruguete
Agnus Dei
Arqueta. Un tesoro en su interior

Datos de interés
Monasterio de San Salvador en Oña (Burgos)
Hasta el 4 de noviembre de 2012
Horarios:
Lunes: permanecerá cerrada.
Martes, miércoles, jueves y viernes: de 10 a 14 horas y de 16 a 20 horas.
Sábados, domingos y festivos: de 10 a 20 horas, ininterrumpidamente.
La admisión de público terminará 45 minutos antes del cierre.
Precio de la entrada: 3 €
Visita guiada (grupo máximo de 20 personas):50 €
Duración de la visita guiada: 50 minutos aprox.
No se admiten guías de grupos a no ser los oficiales de la exposición.
Será necesaria reserva previa
Información y reserva para grupos:
E-mail: expo@lasedades.es