Tras la clausura de Los juguetes de las vanguardias el 30 de enero, el programa de exposiciones del Museo Picasso Málaga para 2011 prosigue  a finales de febrero con la inauguración de la exposición Kippenberger miró a Picasso, que reflexiona sobre la influencia del artista andaluz en Martin Kippenberger, representante de una generación posterior de artistas alemanes que se cuestionaron el papel del arte en la contemporaneidad.

La obra de Pablo Picasso volverá a las salas de las temporales en junio, en esta ocasión acompañada de 120 fotografías realizadas entre 1956 y 1961 por David Douglas Duncan. La exposición, que está organizada en colaboración con destacadas instituciones europeas, adentrará al espectador en el entorno privado del artista, en el que vivió y trabajó.

En otoño, el programa de exposiciones alcanzará un momento excepcional con la retrospectiva de Alberto Giacometti, coproducida con la Fondation Alberto et Annette Giacometti de París, que mostrará en Málaga la evolución del artista de origen suizo, desde sus inmersiones en el surrealismo hasta sus emblemáticas e internacionalmente conocidas esculturas de figuras caminando.

El programa artístico se complementa en el Auditorio  MPM con un  calendario de actividades culturales que incluye seminarios, música, cine, letras y artes escénicas y en el que figuran nombres como el de Chantal Maillard, el escritor Eduardo Mendoza o la bailaora Rocío Molina, Premio Nacional de Danza 2010.

Con motivo de las exposiciones temporales, el MPM tiene previsto editar tres publicaciones que profundizarán en la obra de Kippenberger, Duncan y Giacometti.

Exposición Kippenberger miró a Picasso
21 febrero-29 mayo 2011

Martin Kippenberger (Dormunt, Alemania, 1953-Viena, Austria, 1997) pertenece a una generación de creadores alemanes que analiza el papel del artista en la cultura. Por su muerte prematura ha sido recientemente cuando se ha reconocido de modo internacional su trabajo. La exposición que el Museo Picasso Málaga le dedica es una de las más relevantes de su obra en España, país en el que habitó a finales de los años ochenta. Fue precisamente durante su estancia en la localidad sevillana de Carmona en 1988, cuando Kippenberger desarrolló una especial relación con la figura de Pablo Picasso, atracción que le llevó a pintar la serie Sin título (1988), una selección de las cuales se mostrará en el MPM.

Kippenberger se interesó por las fotografías que David Douglas Duncan realizó a Picasso en los años sesenta. Le dejaron una profunda huella varios retratos que este fotógrafo realizó posteriormente de su viuda Jacqueline Roque tras la muerte del artista en 1973. Estas fotografías le inspiraron la serie de óleos Jacqueline: los cuadros que Pablo ya no pudo pintar (1996), de los que varios podrán verse en la exposición.

Kippenberger miró a Picasso propone una reflexión acerca de los temas comunes en ambos creadores, como es la pérdida, el reflejo de la experiencia personal en el arte y el retrato como género. En este sentido, incluirá también una selección de obras del complejo Medusa (1996), en la que el artista alemán lleva hasta el límite el concepto del autorretrato como representación trágica de la propia existencia.

Comisaria: Eva Meyer-Hermann. Tras trabajar como conservadora jefe en el Van Abbemuseum de Eindhoven ha desarrollado una carrera como comisaria independiente.

Número de obras: cerca de 50 trabajos entre pinturas de gran formato, dibujos y esculturas, así como una selección de más de 60 libros de artista y catálogos y más de 36 carteles diseñados por el artista a lo largo de su carrera.

Picasso crea. A través de la cámara de David Douglas Duncan
20 junio – 25 septiembre 2011

David Douglas Duncan (1916, Kansas City, Estados Unidos) es un fotógrafo internacionalmente reconocido sobre todo por dos temas: sus fotografías de las guerras de Corea y Vietnam y sus fotografías a Pablo Picasso en su estudio. Durante una sus estancias en Europa y por mediación de Robert Capa, Duncan conoció en 1956 a Pablo Picasso en Mougins, Francia. Desde ese día y hasta la muerte del artista en 1973, les unió una gran amistad que propició multitud de reportajes y la publicación de siete libros que introducen al espectador en un espacio íntimo reservado para el trabajo, la familia y los amigos.

La exposición se centra en concreto en parte del proceso creativo de Picasso durante cinco años mediante imágenes captadas por el objetivo del fotógrafo entre 1956 y 1961. Junto a las fotografías, copias de época, el visitante podrá además contemplar ante sí una selección de aproximadamente cincuenta obras de Pablo Picasso, piezas que fácilmente reconocerá en las emulsiones fotográficas de David Douglas Duncan.

La muestra, tras su inauguración en el Museo Picasso Málaga, se exhibirá a continuación en el Graphikmuseum Pablo Picasso Münster de Alemania (15 octubre 2011 – 15 enero 2012) y en La Piscine. Musée d’Art et d’Industrie de Roubaix en Francia (15 febrero – 15 mayo, 2012).

Comisarias: Stephanie Ansari y Tatyana Franck, consultoras de arte contemporáneo.
Número de obras: aproximadamente 120 fotografías de David Douglas Duncan y una selección de 50 obras originales de Pablo Picasso.

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