La casa de subastas Soler y Llach pone a la venta un daguerrotipo de 1845 con una estimación de 60.000-80.000 €, se trata de la primera representación fotográfica, conocida, de una bailarina de  danza española.  Esta pieza del siglo XIX, de autor desconocido, muestra el retrato de una bailarina de la escuela bolera. (Daguerrotipo plena placa coloreado, imagen 20  x 14 cm, marco 33 x 28 cm.) su precio de salida es de 60.000 euros.

La subasta se celebrará el próximo lunes 15 de diciembre junto a otros lotes que permitirán hacer un breve e interesante recorrido por algunas de las tendencias que han sido decisivas en la esfera artística y fotográfica del último medio siglo. Las estimaciones van desde los 1000 a los 40000 €. Esta venta contará con fotografías de Diane Arbus, William Kleim, Robert Maplethorpe, Andrés Serrano, Thomas Struth, Nan Goldin, Gunther Forg, Orlan, Jorge Molder, Sandy Skoglund, Gabriele Basilico, Joan Colom, Antoni Miralda, Marina Abramovic, Christo y Jeanne- Calude, Jordi Cerdá, Joan Fontcuberta, Humberto Ribas, Pere Formiguera, Xavier Rivas, Ouka Léle.

En la década de 1970 la fotografía se institucionalizó iniciando un proceso en el que aumentó su prestigio cultural y artístico. Tuvo una gran visibilidad en la esfera artística, y el hecho de que fuese un medio en el que pesaban tanto las funciones sociales como las distinciones artísticas la convirtió en uno de los instrumentos privilegiados que utilizaron los artistas contemporáneos y en objeto de estudio de escritores, sociólogos, historiadores del arte, filósofos, etc. Este proceso se inició después de la segunda guerra mundial, periodo en el que la fotografía documental fue adquiriendo un gran peso en la esfera fotográfica. Creadores como William Kleim, Joan Colom o Diane Arbus expandieron los límites de la fotografía documental al introducir aspectos vinculados a las corrientes de pensamiento más renovadoras de aquel periodo.

William Kleim ,en los años 50, realizó una serie de fotografías de Nueva York en las que su formación como pintor le llevó realizar imágenes, en las que el accidente jugó un papel importante, fotos movidas, contrastadas, con mucho grano, desenfocadas en las que igual que en la obra de los pintores del Action painting el gesto jugó un importante papel. Joan Colom fue otro fotógrafo que partió de un posicionamiento gestual basado en la obtención de fotografías sin mirar por el visor. Su estrategia se basaba en colocar la cámara en la mano y fotografiar sin ser visto, lo que le permitía obtener imágenes muy próximas, muy directas.

En la década de 1967 John Szarkowski comisarió la exposición New Documents que presentó en el Museo de Arte de Nueva York, en la que mostró la obra de tres jóvenes fotógrafos entre los que estaba Diane Arbus que partieron de sus propias experiencias y visiones para obtener unas fotografías que renovaron el concepto de fotografía documental llevándolo hacia fines más personales.

En este mismo periodo, desde una esfera muy lejana, un grupo de artistas como Cristo, Marina Abramovic, Antoni Miralda o Jordi Cerdà entre otros iniciaron un proceso de desmaterialización de la obra de arte, en el que hicieron del documento un nuevo soporte artístico. Tomaron la fotografía y otros medios alternativos como el video como un instrumento para registrar sus acciones, sus intervenciones en el cuerpo y en la naturaleza.

Las fotografías documentales, realizadas por los artistas conceptuales, son las que hicieron posible la entrada de la fotografía en el mundo del arte durante este periodo. El estilo documental fue una de las líneas hegemónicas de la esfera fotográfica durante varias décadas, aunque hubo otras tendencias que tuvieron un gran peso en este periodo como fue la fotografía construida realizada por creadores como Arthur Tress, Joan Fontcuberta o Pere Formiguera que partieron de un tipo de fotografía fantástica en la que el surrealismo y el absurdo tuvieron un gran peso, aunque fue con el posmodernismo cuando la fotografía construida fue utilizada de forma más generalizada por los artistas. Los posmodernos consideraron a la fotografía como uno de los medios que mejor se adaptaba a sus teorías y está pasó a ocupar un papel central en los debates artísticos de ese periodo, lo que la llevó a convertirse en uno de los medios más atractivos y una mayor visibilidad de la esfera artística de las últimas décadas. La subasta nos permite hacer un breve recorrido por algunas de las tendencias que han sido decisivas en la creación contemporánea.

La subasta de Fotografía y fotolibros está compuesta por 384 lotes que van desde los inicios de este medio hasta el periodo actual. El siglo XIX se inicia con unos daguerrotipos entre los que se encuentra la primera fotografía conocida que se utilizó como representación del flamenco y de cualquier otro tipo de baile español. Es un daguerrotipo realizado cerca de 1845 en el que se fotografió a una bailarina de la escuela bolera en posición de bailar, estimación 60000 – 80000 €. Es una pieza de una gran belleza plástica y de una gran rareza ya que por cuestiones técnicas los fotógrafos de este periodo realizaban las fotografías con los modelos sentados y apoyados para que no saliesen movidas y se avanza temáticamente y conceptualmente a la excelente pintura Lola Valence que realizó Eduard Manet en 1862 . En este periodo también hay un grupo de fotografías de Charles Clifford, entre las que destaca la tomada en Barcelona durante la visita de Isabel II en 1860, estimación 2900 – 3500 € y una serie de los primeros tirajes comercializados por el estudio J.Laurent, que son los más apreciados y buscados por los coleccionistas, por su gran calidad, estimación 500 – 700 € .

El siglo XX se inicia con las fotografías pictorialistas de José Ortiz Echagüe, Antonio Arissa, Vicente Martínez Sanz y Miguel Goicoechea entre otros. Le siguen las fotografías modernas de Josep Sala, Pere Català Pic, Antoni Arissa, Gabriel Casas, Josep Alemany, Alexander Klebnikov, Theodore Roszak y Carlos Nyssen entre otros. En el apartado de la Guerra Civil hay fotografías de Robert Capa, Alberto Benítez, Juan Guzmán, Faustino Mayo, Martín Santos Yubero y algunas de las imágenes más impactantes y dramáticas de las que realizó Agustí Centelles de los bombardeos de Lleida y de Barcelona, 1000 – 1400 €. La posguerra europea está representada por las dos grandes tendencias del momento. Las primeras fotografías están vinculadas al formalismo, sus autores Annelise Hager, Konrad Hoffmesister, Ramón Masats, Francesc Catalá-Roca recuperaron el espíritu experimental del periodo de entreguerras, el segundo grupo está compuesto por fotografías de Robert Doisneau, Alfred Eisenstaedt, Rene Burrí Thomas Hopker sus fotografías siguen la tradición documentalista y su estética esta próxima al humanismo, también hay una importante secuencia de fotografías tomadas por el fotógrafo mejicano Rodrigo Moya a Ernesto Che Guevara en julio de 1964, estimación 7000 – 8000 € cuando ocupaba el cargo de director del Banco Nacional en La Habana, y nos muestran, de una forma muy natural y directa, diferentes aspectos del Che. El siglo XX finaliza con una serie de Retratos de Pablo Picasso, Salvador Dalí y José Ortega y Gasset, realizados por Jacqueline Picasso, Nicolas Müller, Pilippe Halsman o Ricard Sans, y con un grupo de fotografías que se inicia en el mayo de 1968 y que ilustra los cambios sociales y de hábitos que se produjeron durante los años 1960 y 1970.

En el apartado fotolibros hay publicaciones entre las que se encuentran Sumo, espectacular monografía de Helmunt Newton estimación 6000 – 7000 €; L´Ange Heuterbise, de Man Ray y Jean Cocteau, estimación 1800 – 2200 €; Ein Ghetto im Osten, de Moi Ver, estimación 400 – 500 €; Images a la sauvette, Henri Cartier-Bresson, estimación 2500 – 3000 €, entre otros.

Datos de interés: Soler y Llach I Beethoven, 13 – 08021 Barcelona. Tel. 932018733 I fax. 932023306  – syl@soleryllach.com  www.soleryllach.com

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