«The Qatar Drawings»
El trabajo de Jan Hendrix, fuertemente enraizado en la gráfica, explota al máximo la idea del proceso y del trabajo de taller. Toda su obra es el resultado de un conjunto de pasos previos a la obra final –el viaje, la mirada, el registro fotográfico y el dibujo– en los que lleva a cabo una auténtica economía de lo gráfico. Mediante la síntesis y la abstracción genera motivos gráficos con los que traduce el dibujo a la gráfica y de ahí al papel, el metal o la arquitectura.
Lo que se origina como un pequeño dibujo de un motivo natural termina convirtiéndose en la piel de un edificio una vez que ha pasado por los procesos de dibujo a escala real, maquetación, recorte y ensamblado. Pero también en un gran panel formado por múltiples planchas de metal esmaltado. Las dos piezas que se exponen en el Museo del Grabado de Marbella comparten así su origen con el proyecto que Hendrix ha estado desarrollando en colaboración con el Arquitecto Ricardo Legorreta en los últimos años para la Education City en la ciudad de Doha en Qatar y que será inaugurado en Julio de 2010.
Estas imágenes presentan el proceso de llevar el dibujo a la gráfica y de ahí a la arquitectura.
Issa Mª Benítez
Jan Hendrix nace en el poblado de Maasbree, Holanda, en el seno de una familia profundamente arraigada a la vida agrícola de la región y quienes se oponen drásticamente al oficio de artista que desde los 16 años escoge Hendrix, por haber fallado persistentemente en todas las materias escolares excepto el dibujo. Entre sus recuerdos de infancia destaca un día de campo, a bordo del primer coche que adquiere su padre y una visita a un museo local, reminiscente del Kunst und Wunderkammer que habría de ser una referencia clara en su obra posterior.
Corrido de la casa paterna, a sus 17 años ingresa a la Real Academia de Arte de Den Bosch (pueblo natal de El Bosco), de donde es expulsado por su conducta rebelde. Luego, invitado por el artista japonés Shinkichi Tajiri, ingresa como alumno al Atelier 63 de la ciudad de Haarlem, la institución educativa más radical de ese momento (1968-69). Ahí conoce a sus mentores que, a través del cine y de la danza, lo introducen a una visión más multidisciplinaria del arte. Mientras prosigue sus estudios, se integra a la imprenta Smeets en la ciudad de Weert para aprender el oficio de impresor de pruebas.
En 1971-75, instigado por el artista JCJ van der Heyden, continúa sus estudios de maestría en la Jan van Eyck Academie, es ahí que inspirado por su contacto con su profesor Han Seur se enfoca hacia la gráfica. En ese periodo existe un fuerte contacto de intercambio y un enlace discursivo con un grupo de artistas instalados en Düsseldorf que se había conformado como un think-tank para gentes como Beuys, Richter, Spoerri, los esposos Becher, Kieffer, Lupertz, Filliou, Nam June Paik y Dieter Roth, y que ejercieron una influencia tanto en las actividades como los proyectos de la Maestría de Hendrix, ampliando sus códigos de producción, hasta llevarlo a seleccionar el papel y la tinta como sus medios definitivos.
La formación poco ortodoxa de estos años, lo conduce a acercarse a diversos proyectos de producción de Libros de Artista, entre ellos Beau Geste Press en Devonshire Inglaterra, donde conoce a Martha Hellion. A raíz de este encuentro Martha Hellion se casa con Hendrix en Holanda y viajan juntos al norte de Noruega donde trabajan en el montaje de un taller de serigrafía, construido con la ayuda del astillero local. Actualmente viven separados.
Ya de regreso en Maasticht en 1975, Hendrix recibe una beca del Ministerio de Cultura de Holanda, que utiliza para viajar a México, con la encomienda de estudiar el paisaje mexicano. Su primer contacto es con José Chávez Morado quien lo invita a crear un taller de serigrafía en la Alhóndiga de Granaditas, en Guanajuato para hacer el registro de los sellos cilíndricos de la colección precolombina de Frederick Fields.
A partir del nacimiento en 1976 de su hijo Jonás en la ciudad de México, Hendrix frecuenta el taller de Luis López Loza, un espacio colectivo en los edificios Condesa, en donde trabajan Emilio Ortiz, Fiona Alexander y Leonora Carrington entre otros y un lugar de encuentro de la comunidad artística más activa de ese momento (artistas, galeristas, impresores, etc.). Ahí conoce a dos individuos que tendrán una gran influencia en su carrera, Francisco Toledo y Gunther Gerzso, con quien comparte sus ideas sobre la ética y la perseverancia del artista… La intensa generosidad de los mexicanos ejemplificada por la invitación de Miguel Cervantes para exponer en la Galería Ponce, contribuyen a la decisión de Hendrix para establecerse a partir de 1978 en este país, abandonando la dualidad que mantenía en viajes frecuentes entre Holanda y México, con largas escalas en Islandia, en donde había encontrado un laboratorio de paisaje interminable relacionado con su trabajo y con el paisaje volcánico de México. Este periodo se formaliza en la producción de varias de carpetas realizadas en ambos países, principalmente sus primeras colaboraciones con el impresor Piet Clement en Ámsterdam.
Ya radicado en México, aquí establece su taller que dedica a la producción propia y a invitar a otros artistas de mexicanos a experimentar con la serigrafía, siguiendo la práctica de los talleres colectivos. En este periodo, por invitación de Alejandro Luna también trabaja en algunas escenografías para la Compañía Nacional de Teatro.
Paralelamente, inicia su investigación sobre la composición fractal, un ejercicio que le permite profundizar sobre el sentido de la escala y la búsqueda de soportes de papel que proporcionen un espacio con una atmósfera y carácter propios. A partir de un viaje a Kenya, la intensidad lumínica producida por su situación sobre el Ecuador, lo lleva a experimenta con la eliminación del color y el uso del alto contraste como elementos mínimos para la construcción del paisaje. El dibujo adquiere cada vez más importancia: las piezas que produce son dibujos transferidos a los diversos soportes que ha investigado y descubierto. El resultado se congrega en el catálogo Diario de Fatigas.
En 1992, Hendrix emprende el proyecto Bitácora, consistente en la creación de una exposición revolvente que evoluciona conforme se produce la obra. Bitácora lo lleva a China, Australia, Indonesia, Irán, Turquía, Alemania, Holanda, Irlanda y México (Oaxaca). En este trayecto (Australia), decide iniciar la conformación de Script, como una guía de apuntes surgidos de la necesidad de resguardar una memoria del viaje.
Una de las prácticas particulares de la producción de Hendrix es la colaboración con escritores para la edición de libros de autor meticulosamente ilustrados con obra original de Hendrix (con Gabriel García Márquez, Seamus Heaney, Bert Schierbeek, etc.).
En 1999 descubre la existencia de un sistema de residencias para artistas a nivel mundial y corre con la suerte de iniciar esta experiencia en Bellaggio, de la Fundación Rockefeller. Ahí encuentra la fórmula consistente en el retiro a lo largo de un mes, como el momento de aislamiento necesario para estructurar el guión de los contenidos de su trabajo durante el resto del año. La retroalimentación necesaria para la renovación de su obra proviene también de su experiencia como miembro del Sistema Nacional de Creadores del FONCA, un puente que le permite el intercambio con una generación de jóvenes lo suficientemente distante como para crear lazos mutuamente estimulantes.
Su currículum de exposiciones en museos y galerías es amplísimo, con un promedio de tres a cuatro exposiciones por año. Destaca su continua participación en la Galería Clement de Ámsterdam, Holanda y su trayectoria en México, primero a través de las extintas Galería Ponce y Galería Arte Contemporáneo y donde hasta ahora sigue con la Galería de Arte Mexicano, además de La Caja Negra en Madrid, España.
Durante sus primeros 25 años de actividad, Hendrix ha tenido exposiciones individuales en el Bonnefanten Museum (Maastricht), el Museo de Arte Moderno (México D.F.), los Archivos Imperiales de la Ciudad Prohibida (Pekín), el Tropenmuseum (Ámsterdam), el MACO (Oaxaca), la Calcografía Nacional de la Real Academia de San Fernando (Madrid) y el Irish Museum of Modern Art (Dublín), …agregando su participación en numerosas exposiciones colectivas y la adquisición de obra por una gran cantidad de colecciones públicas y privadas.
A partir de la última década, dedica una parte importante de su tiempo a proyectos de colaboración arquitectónica, que despuntan en la investigación de la composición fractal, incorporándose al proyecto arquitectónico desde de su concepción. El primero de esos murales pertenece al Hotel Habita (con Enrique Norten y Bernardo Gómez Pimienta); a partir de ese proyecto ha desarrollado piezas para la fachada de la Rectoría de la UAM Ixtapalapa (con Alberto García Lascurain), la fachada de Centro de Diseño, Cine y Televisión (con Salvador Arroyo, Alejandro Hernández y Juan Carlos Tello) y el techo/caja de luz del Centro Cultural del Fondo de Cultura Económica (con Teodoro González de León).
Este trabajo se ha enfocado a la experimentación con la escala, mediante propuestas utópicas que ponen a discusión la tesis de la inutilidad de la arquitectura vs. la utilidad del artista visual, con la intención de levantar el embargo impuesto por el muralismo a la práctica artística en México.
Desde 2007, con la exposición itinerante Storyboard en el MARCO de Monterrey, el Museo Amparo de Puebla, y el Instituto Cultural Cabañas de Guadalajara, Hendrix opta por un giro decisivo frente a su producción artística. El cambio cobra vida a partir de una residencia en las Islas Canarias que concluye en la exposición Malpaís, organizada por el Museo XXXX de Lanzarote: una muestra que se origina (se inspira) en la investigación y el análisis del paisaje local. A partir de ese momento, la obra evoluciona hacia proyectos desarrollados in situ, en los que Hendrix sintetiza la experiencia y el entorno, para luego “exportarlos” a otros lugares, transformados por la memoria en dibujo, sombra y materia.
A ese exitoso experimento se agrega otra residencia en Pasadena, California donde tiene la oportunidad de compenetrarse en los Huntington Gardens and Library para iniciar un proyecto que seguirá en proceso y que consiste en la interlocución con estudiantes sobre diseño y naturaleza, acercándose cada vez más a la noción de inter-disciplina donde –al igual que sus maestros– el artista se convierte en faro ó pivote de otras especialidades.
El trabajo cada vez más complejo de Hendrix, que le valió en 2008 el premio internacional de la Real Academia de San Fernando por la innovación y aportaciones a las artes gráficas, es el resultado de una alianza y una complicidad que ha establecido a la vez con el productor Adam Lowe y con el editor Fernando Cordero, conformando un think-tank enfocado a desarrollar experimentos –primordialmente de obra a gran escala– que surgen de dibujos monumentales cada vez más elaborados y audaces.
En su conjunto, traducen la vivencia y la memoria del artista al imaginario de un paisaje artificial, realizado y moldeado con la precisión del aluminio recortado con tecnología láser. Como contrapunto, Hendrix retoma la imagen del bosque de su madre para convertirlo en una celosía continua –síntesis de nervaduras y sombras– convertidas en una elipsis onírica de un encaje interminable.
Ese reto de transportar la monumentalidad del paisaje a otro contexto sólo es posible mediante comisiones que se convierten en una apuesta compartida, como es la gran patio en colaboración con el Arq. Ricardo Legorreta para la Universidad Internacional de Qatar, o como el homenaje a Doña Ángeles Espinosa Iglesias para el jardín del Zócalo de Puebla, ambos proyectos a inaugurarse en 2009.
Sin embargo –en una paradoja que recuerda las tribulaciones de Gulliver– el mayor anhelo de Hendrix sigue siendo el de inventar un timbre postal.
Texto del Catálogo de la exposición
El currículum desglosado de Jan Hendrix se puede consultar en:www.janhendrix.com.mx
Datos de interés:
Jan Hendrix
«The Qatar Drawings»
15 SEPTIEMBRE – 11 DICIEMBRE 2010
MGEC Museo del Grabado
C/ Hospital Bazán, s/n
29601 Marbella, Málaga. España
