Original y copia de la armonía

Andrés Merino Thomas

Uno de los mejores conjuntos escultóricos que se conservan en España es sin duda la colección de obras en mármol que, procedente de la herencia de la reina Cristina de Suecia, adquirieron Felipe V e Isabel de Farnesio en 1724. Los monarcas lo ubicaron en su mayor parte en la denominada Galería Baja de estatuas del Palacio Real de La Granja de San Ildefonso, espacio estético de excelencia a decir de cortesanos y viajeros. Al recorrer la estancia tercera, los visitantes centraban su atención en una pieza de especial calidad, la representación –en principio- de los personajes clásicos Cástor y Pólux, conocida popularmente como Grupo de San Ildefonso. Su original, labrado en mármol blanco en el siglo I. d.C., estuvo situado en aquél lugar, sobre un pedestal, también de mármol, durante cien años, hasta que a principios del siglo XIX pasó a formar parte de las colecciones regias que dieron vida al Museo Nacional del Prado. Entonces fue sustituido por el vaciado de yeso, de extraordinaria calidad, que José Panucci realizó entre 1792 y 1796 por orden de Carlos IV, que comenzó a encargar la realización de copias de sus colecciones de escultura con destino a los Reales Sitios.

Nos hallamos ante dos jóvenes con la cabeza laureada, ante un pequeño altar ante el que van a realizar un sacrificio. Uno de ellos sostiene una antorcha, en la que prende el fuego, mientras el otro participa del acto sagrado sosteniendo, también con su mano derecha, una pátera sobre la que deposita fijamente su mirada, concentrándose quizá en el objeto de la oblación que va a ser presentada. Su mano izquierda descansa sobre el hombro de su acompañante, signo de confianza y amistad. El debate sobre la identificación de los personajes ha ido parejo a la de la deidad que les acompaña a la izquierda, una figura femenina de estilo arcaico. Se habla de Cástor y Pólux ante la diosa de los infiernos, Perséfone, momentos antes de su separación. O de Hipnos y Tánatos, o de la conducción de Antínoo al Averno. En interpretación de María Jesús Herrero, debería volver a atenderse a la lectura que realizó en 1767 el arqueólogo Winckelmann, identificándoles como Orestes y Pílades, ofrendando a Artemisa. Lo cierto es que desde que en 1638 apareciese en el tratado de François Perrier sobre las estatuas más célebres aparecidas en Roma, no ha dejado de aparecer en los manuales y libros sobre escultura clásica. Y con toda justicia, porque además de ilustrar cánones de representación de proporciones humanas, es una sublime representación de la amistad, de comunicación en silencio, en serenidad. Con equilibrio. Sean quienes sean. Personajes mitológicos, reales o imaginarios, quienes componen el Grupo de San Ildefonso continúan trasladando a quienes les contemplan una suave sensación de armoniosa serenidad.

La pieza forma parte en estos días de la exposición “Corona y Arqueología en el Siglo de las Luces”, que en las Salas de Exposiciones Temporales del Palacio Real de Madrid presenta un panorama de la labor que los monarcas españoles del XVIII desarrollaron a favor de la investigación del pasado, tanto de la Antigüedad clásica como de la etapa árabe y la precolombina en los territorios de la monarquía. Un impulso no sólo a través del mecenazgo a los estudios sobre el terreno, simbolizados principalmente en los hallazgos de las ruinas de Pompeya y Herculano (descubiertas bajo el reinado del que sería Carlos III de España en Nápoles) o expediciones a lugares de interés arqueológico, como hemos visto con el Grupo de San Ildefonso, en la adquisición y puesta en valor de los modelos estéticos clásicos a través de la reproducción de piezas. En este caso, mediante el encargo de un magnífico vaciado a Panucci, que pertenecía a la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Una Real Academia, institución creada por la dinastía que en el siglo XVIII aportó grandes esfuerzos por el desarrollo cultural en nuestro país.

 

“Vaciado del Grupo de San Ildefonso” (1792-1796)

José Panucci (1870-1945)

Yeso (161 x 99 x 50 cm)

Palacio de La Granja de San Ildefonso, La Granja de San Ildefonso (Segovia)

Exposición “Corona y Arqueología en el Siglo de las Luces

Organiza: Patrimonio Nacional

Colabora: Real Academia de la Historia

Patrocina: Fundación Banco Santander

Comisarios: Martín Almagro y Jorge Maier

Sede: Salas Génova. Palacio Real de Madrid (C/ Bailén, s/n)

15 de abril a 11 de julio de 2010

Entrada gratuita

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