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Informe de Caja Madrid sobre el patrimonio histórico y cultural

El director de la Fundación Caja Madrid, Rafael Spottorno, ha presentado el informe “Conservación del patrimonio histórico en España, análisis económico”, el único estudio que evalúa las inversiones en conservación, restauración y rehabilitación patrimonial realizadas en nuestro país tanto en el ámbito público como en el privado.

Este nuevo texto es la tercera actualización que se realiza sobre el tema tras los primeros estudios publicados por Fundación Caja Madrid en 1998 y 2001 respectivamente, lo que le ha convertido en un documento de referencia sobre la gestión patrimonial en España dado que, como ha señalado Rafael Spottorno “ Hay cierto reparo a medir económicamente las actividades culturales, por ello los estudios existentes son fragmentarios, esporádicos y pequeños, solo el informe de la Fundación Caja Madrid ofrece un estudio sistemático sobre la materia”.

Los datos y conclusiones de esta nueva actualización se han elaborado a partir de las investigaciones de los profesores Juan Alonso Hierro y Juan Martín Fernández, ambos miembros del departamento de economía aplicada de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Complutense, unas investigaciones que, como ha comentado Juan Alonso Hierro, “Han supuesto un complejo trabajo durante dos años, ya que las fuentes sobre el tema son insuficientes, fragmentarias y poco homogéneas y, además, la labor de recolección de datos ha sido compleja ya que el nivel de respuesta y colaboración de entidades tanto públicas como privadas apenas ha llegado al 20 por 100”.

Una de las novedades más destacables del nuevo estudio es que, por primera vez, no solo se trata el gasto público y privado en conservación patrimonial sino que también se analiza la rentabilidad del patrimonio histórico y cultural comparando los índices de consumo en turismo cultural de cada comunidad autónoma con el gasto público realizado por estas para preservar su patrimonio, lo que presenta al turismo cultural como un importante elemento dinamizador de la economía. Frente al gasto total que se realizó en 2004, fecha del estudio, en conservación patrimonial, que no alcanzó los 1.900 millones de euros, la actividad que el patrimonio generó supuso una aportación de 2.500 millones de euros al PIB, lo que hace de la conservación patrimonial y, por extensión del  turismo cultural, un sector tremendamente rentable.

Además otra de las novedades del estudio es que incluye una comparativa internacional entre el gasto en patrimonio histórico en nuestro país respecto a Francia, Italia y Portugal, los tres países con los que España comparte características geográficas, económicas y patrimoniales. Estos estudios han reflejado que Francia e Italia son las administraciones que dedican mayor volumen de recursos a la conservación de su patrimonio, pero en relación al gasto público total de cada país es España quien se sitúa a la cabeza de la inversión en conservación patrimonial.

Respecto al gasto en conservación patrimonial español destaca que el 91 por 100 de este gasto se realiza por la administración pública mientras que las inversiones privadas apenas llegan al 9 por 100 y son realizadas principalmente por la Iglesia Católica y por la Fundación Caja Madrid la cual, desde su creación en 1991, ha orientado gran parte de su actividad y recursos a la conservación del patrimonio artístico, invirtiendo en estos años más de 164 millones de euros, lo que la convierte en la institución privada que más atención dedica a nuestro patrimonio histórico.

A pesar del rigor y seriedad del estudio la falta de datos concretos y la poca información estadística elaborada sobre el tema  hacen que, como ha señalado Juan Alonso Hierro “Los datos del informe sean solo aproximaciones y no cifras absolutas”.

En cualquier caso se trata del estudio más detallado y exhaustivo sobre la repercusión económica de la conservación patrimonial, cuya conclusión más relevante es, sin duda, el increíble potencial como motor económico que puede llegar a alcanzar nuestro patrimonio histórico, el cual, a pesar de la escasa inversión con la que hasta ahora ha contado sigue generando una importante aportación a la economía nacional.

Marta de Orbe