El Museo del Prado ha inaugurado las nuevas salas dedicadas a la pintura española medieval y renacentista, patrocinadas por la Fundación AXA. Las nuevas salas forman parte del programa La Colección. La otra ampliación (programa de reordenación y ampliación de colecciones), incluido como proyecto prioritario dentro del Plan de Actuación 2009-2012 del Museo e iniciado el pasado año con la apertura de una sala dedicada a los retratos de los primeros Borbones, también patrocinada por la Fundación AXA uno de los socios benefactores más antiguos del Museo, con el que lleva colaborando más de una década, y la posterior instalación permanente de las colecciones del siglo XIX

Con la apertura al público de estas salas, que tendrá lugar el viernes 26 de marzo, el Prado completa la presentación de las colecciones que quedarán instaladas en la planta baja del edificio Villanueva, conforme a lo previsto en el proyecto La Colección. La otra ampliación, ampliando de forma significativa la exhibición de sus fondos de pintura española desde el Románico hasta el Renacimiento. Reordenada y ampliada, la selección de obras expuestas en este nuevo espacio expositivo permitirá al visitante realizar un exhaustivo recorrido por las principales corrientes pictóricas desarrolladas en España entre los siglos XII y XVI, comenzando por los frescos románicos de Santa Cruz de Maderuelo y San Baudelio de Berlanga, a los que seguirán los grandes retablos de Rodríguez de Toledo y de Nicolás Francés y las pinturas de Luis Alincbrot, Fernando Gallego, Bermejo, Paolo de San Leocadio, Pedro Berruguete o Juan de Flandes. Ya en pleno Renacimiento y hasta el Manierismo, el nuevo recorrido propuesto centrará su atención en las obras de Fernando Yáñez, Machuca, Correa de Vivar y Juan de Juanes, para concluir con las tablas del manierismo espiritual de Luis de Morales, ampliamente representado en el Prado.

Las siete salas en las que se exhibe ahora esta parte de la colección del Prado, la mayoría de ellas recuperadas para el uso expositivo gracias al traslado de varias dependencias técnicas del Museo al edificio de la ampliación inaugurado en 2007, se distribuyen en torno a la Rotonda baja de Goya, sala en la que -por su especial configuración- se ha optado por incluir una importante representación de la colección de escultura clásica del Museo (ver detalle en la relación de obras facilitada en páginas finales). Para acoger estas pinturas y facilitar el acceso a los visitantes, esta zona del edificio Villanueva ha requerido una intervención arquitectónica de Rafael Moneo, autor del citado proyecto de ampliación del Museo, que se ha ocupado también de la nueva disposición de la sala 51 c en la que se exhibirán, con una arquitectura evocativa de los espacios de los que proceden, las pinturas románicas de San Baudelio de Berlanga (Soria) y de la capilla de Santa Cruz de Maderuelo (Segovia).

Como paso previo a esta intervención y en paralelo a ella, se ha procedido a la restauración de algunas pinturas, así como a la recuperación de la espectacular tracería gótica del Santo Domingo de Silos de Bartolomé Bermejo y a dotar de nuevos marcos a otras. Sin duda, la intervención más ambiciosa ha sido la restauración de los frescos de la capilla románica de Maderuelo, realizada en colaboración con el Instituto del Patrimonio Cultural de España (IPCE) y dirigida por Juan Ruiz. A ésta se suma la restauración realizada por el taller del Museo del Prado de las obras de Borrassa, Guerau Gener, y Gonçal Peris, Pere Lembrí, Juan Sánchez, Juan de Nalda y los Maestros de los Luna y de Robredo.

También se ha procedido a restaurar marcos como el del Santo Domingo de Silos de Bermejo, de tracería gótica, cuya parte superior se conservaba en el Museo Nacional del Prado, pero no así los largueros, propiedad del Museo Arqueológico Nacional, depositados ahora en el Prado para que esta obra maestra de Bermejo recupere su apariencia original.
Itinerario nuevas salas

En la selección de obras para estas nuevas salas ha primado el criterio de calidad, de exhibir lo mejor de esta parte de la colección, y que estén representados en ellas los pintores más relevantes de los que el Prado posee obras. También ha sido otra de las prioridades la presentación pública –en gran parte por primera vez- de las obras adquiridas en los últimos años, la mayoría de ellas tras pasar por el taller de restauración.

Para las salas 51 a y b, dedicadas al estilo internacional y al hispanoflamenco, y de las salas 52 a, b y c, dedicadas al Renacimiento, se ha optado por disponer las piezas capitales de la colección –o las más famosas o conocidas de su autor, como en el caso de Pedro Berruguete-, en posición destacada. La sala 51 b está presidida por el Cristo bendiciendo de Fernando Gallego. La sala 51 a tiene al fondo el Santo Domingo de Silos de Bermejo, con su marco de tracería original restaurado. La sala 52 a está presidida por la Crucifixión de Juan de Flandes y en las paredes laterales se han situado la Virgen del caballero de Montesa de Paolo de San Leocadio y el Auto de fe de Pedro Berruguete. La sala 52 b tiene en el eje de la puerta la Santa Catalina de Fernando Yánez y en ella destaca también especialmente la presencia de la Virgen del Sufragio o de las ánimas del Purgatorio de Pedro Machuca, una de las grandes pinturas del Renacimiento español aunque realizada en Italia y que ha sido restaurada, siendo esta la primera vez que se muestra al público tras su notable intervención. En la sala 52 c destacan en sus paredes laterales la Anunciación de Correa de Vivar y la Última Cena de Juan de Juanes.

Las dos salas restantes, 50 y 51 c presentan un carácter singular. La primera acoge los dos grandes retablos de Rodríguez de Toledo y de Nicolás Francés. La segunda, dedicada exclusivamente a la pintura románica, es, sin duda, la que evidencia un cambio radical respecto a su presentación pública anterior. La capilla de Santa Cruz de Maderuelo (Segovia), se presenta con sus pinturas restauradas y con una modificación sustancial de su apariencia interior y exterior, proyectada por Rafael Moneo. Las seis pinturas de San Baudelio de Berlanga (Soria), depósito temporal indefinido del Metropolitan Museum de Nueva York, se han colocado con un montaje nuevo, asimismo diseñado por Moneo, que reconstruye la disposición original de las pinturas en el interior de la ermita mozárabe de San Baudelio de Berlanga: cuatro de ellas: Elefante, Oso, Soldado y Cortina, en el frente de la galería del coro sobre arcos de herradura, y las dos restantes, Cacería de Liebres y Cacería del ciervo, en el registro inferior del cuerpo de la ermita en el muro norte.

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1 COMENTARIO

  1. Me parece estupendo tanto por la exposicion como por el detalle de cada sala. Enhorabena!!

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