El Consejo de Ministros, a propuesta de la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, ha concedido la Orden de las Artes y las Letras de España a la cantante estadounidense Joan Baez, en reconocimiento a una trayectoria regida por el compromiso artístico y personal en favor de los derechos individuales y las libertades civiles y políticas.
Joan Baez ha supuesto un referente que trasciende el ámbito musical para toda una generación de españoles defensores de la libertad política y la convivencia pacífica.
Cantante y activista política
Joan Baez (Staten Island, Nueva York, 1941) constituye un magnífico ejemplo de artista comprometida con la realidad de su tiempo. Su labor artística alcanza un mayor brillo y significación en la medida en que siempre se ha orientado, a lo largo de una larga y coherente carrera, que sobrepasa ya los cincuenta años, a la defensa de los derechos civiles y libertades individuales y colectivas.
Este compromiso no hace más que engrandecer una trayectoria artística caracterizada por la constancia en la reivindicación de las libertades, y en la que conviven con naturalidad y coherencia los logros artísticos y sociales: seis álbumes de oro, un Grammy honorífico al conjunto de toda su carrera (2007), dos Doctorados Honoris Causa, y una pléyade de innumerables reconocimientos sociales, políticos y artísticos dan fe del reconocimiento mundial a una figura clave de la música popular y la lucha por las libertades de la segunda mitad del siglo XX.
Resulta inquietante que una figura a quien se describe como «…un referente que trasciende el ámbito musical para toda una generación de españoles defensores de la libertad política y la convivencia pacífica» …, como «… artista comprometida con la realidad de su tiempo»… y como orientada a «… a la defensa de los derechos civiles y libertades individuales y colectivas»… admita ser condecorada por los representantes de un régimen que, fraudulentamente y partiendo del franquismo (no olvidar quien decidió que fuera el sucesor del dictador) ha engañado a un pueblo (desinformado) instaurando una pseudo-democracia (oligarquía de partidos) al sevicio un poder (internacional) que de democrático no tiene nada. ¿O es que esta señora lo ignora? Si así fuera, sería inquietante. Si no, más inquietante aún.
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