unnamed (1)¿No es perfectamente lógico sentarte en el pasto, ver el atardecer y hacer nada? Sí, lo es. Suena el móvil, te olvidaste de la cita, suena el móvil, tus amigos te quieren ver. Bebes agua, no haces nada, es hermoso, voces de fondo y en tu cabeza.

También es posible estar en Madrid, que sea jueves, viajar en tren, pensar en cosas de este mundo y (re)descubrir las Picnics Sessions que siempre, o casi siempre, insisten en esos gestos que en otros contextos pasarían desapercibidos.

Esos jueves que se presentan como una colección de prácticas de lo sensible, de prácticas que persiguen todo eso que se escapa. Este año nos hemos refugiado en el poder de la voz, en su condición efímera, en su valor político, en su valor poético, en el lenguajeo y sus posibilidades en el espacio. Y es que lo sensible que se precie de tal debería ofrecerse siempre a infinitas lecturas… y en eso estamos: los sentidos únicos no son para nosotros.

Nos perdemos, nos desbordamos, nos descolocan, nos ponen del revés…nos cuestionan. Vos bien, voz mal. Es como en esas experiencias extra-corporales de las que algunos hablan, queremos salir de nosotros y vernos desde fuera, y seguir ascendiendo… todos juntos, porque la comunidad efímera que se construye en las Picnics Sessions sigue siendo nuestro viaje astral.

¿Y por que no? fuegos fatuos, esa inflamación de ciertas materias que se elevan de ciertas sustancias animales o vegetales en putrefacción. Esas llamas de procedencia desconocida nos hipnotizan. Se produce sentido, se baila, se levanta la voz o se sintetiza, se fomenta el autoplacer, se expone y se dispone, se habla y se ríe, se desarrollan así los contenidos que definen estas Picnics Sessions y de esos tipos que ven no sólo la luz, sino también la íntima oscuridad a la que llega la sesión. (Comisariado por Maguí Dávila y José Villalobos).

PICNIC SESSIONS
CORRIMIENTOS DE VOCES
2 JUN — 14 JUL 2016
21:00 — 23:00 H.
(APERTURA PUERTAS 20:30 H.)

Centro de Arte Dos de Mayo
Avda Constitución 23
28931 Móstoles, Madrid

Artículo anteriorUn manuscrito del siglo XV de la BNE en la exposición sobre Ramón Llull de Barcelona
Artículo siguienteCómo cuidarse para vivir más y mejor