De la mano de María Porto, Antonio de Felipe expone en el Espacio de las artes de El Corte Inglés en Madrid. En la presentación, el artista planteaba, precisamente, si el arte debe ser un objeto de culto o accesible al público, incluso para aquellos que no saben nada de arte. La singularidad de esta exposición con las obras míticas de Antonio de Felipe estriba en que no solo se pueden ver y comprar los cuadros, sino incluso, como recalcaba María Porto, pagar a plazos con tarjeta.
Pocas veces se ponen los precios junto a los cuadros en una galería y en eso también esta exposición rompe moldes. Audrey Hepburn, la mítica obra de Antonio de Felipe, puede ser suya por poco más de 24.000 euros. El abanico de precios es amplio hasta los 4.000 euros que cuestan algunos cuadros que reproducen botas de la NBA. Y si prefiere una serigrafía los precios oscilan entre los 600 y los 720 euros.
“Vender un cuadro es como desprenderse de un hijo, pero si no se vende el artista no come», comentaba con ironía Antonio de Felipe al recordar sus primeros años a caballo entre la Facultad de Bellas Artes y la agencia de publicidad en la que trabajaba. Junto a él una infatigable María Porto embutida en sus clásicos leggins más emocionada que el propio artista al describir algunos de los cuadros que desde Marylin a Madonna, pasando por Blancanieves, Tintín o las famosas vacas de Felipe, representan toda una época de nuestra vida. Por cierto el desayuno no fue con diamantes, sino con churros.
Reconocido como uno de los máximos exponentes del arte pop en España, Antonio de Felipe llega al Espacio de las Artes de El Corte Inglés de Castellana con una exquisita selección de piezas que ofrecen un pequeño recorrido por la obra del artista. Entre esta veintena de acrílicos sobre lienzo se pueden encontrar algunos de sus más preciados iconos, como la actriz Audrey Hepburn a quien dedica algunas de sus mejores obras.
Su estilo personal y característico, capaz de combinar el mundo real con el cómic, queda reflejado en títulos como Gran Copa Davis, Superdeportista de élite o Esquí alpino. Y es que el mundo del deporte, como el de los dibujos animados, forma parte de este universo rico en matices que propone el artista.
Magnífico retratista, Antonio de Felipe no sólo ha pintado a personajes relevantes de la sociedad española, sino que también se ha decantado en numerosas ocasiones por personajes que han llenado la imaginación de varias generaciones, como Blancanieves o Tintín, quienes también están presentes en esta exposición. Junto a ellos, una Marilyn rodeada de flores, un guiño a Madonna y un recuerdo a Michael Jackson, que forman parte de sus series más significativas como Cinemaspop, Popsport y Lpop. Son pequeños homenajes a personajes míticos y una evocación al espíritu más puro del arte pop.
“La interpretación de la obra la tiene que hacer el propio espectador” suele decir Antonio de Felipe porque en esta manifestación colorista de imágenes y alusiones cada uno es libre de soñar y elegir. Con una técnica muy definida y elaborada, el artista recurre a los recuerdos comunes de nuestras vidas para recrear un vínculo emotivo con el espectador.
Sus tres referentes artísticos, Velázquez, Sorolla y Warhol, están presentes en toda su trayectoria profesional, desde aquellas Meninas que pintó en su primera etapa, hasta la última serie, que bajo el título Lpop, propone una nueva experiencia vital.
Antonio de Felipe, valenciano y artista de vocación, estudió Bellas Artes en su tierra natal para luego asentarse en Madrid y continuar una carrera que le ha llevado a recorrer distintos países en sus más de 80 exposiciones por España y el extranjero, como Berlín, Bruselas y Rusia. La exposición incluye más de una veintena de lienzos y numerosas serigrafías que muestran su capacidad creativa y una fuerte personalidad artística que le convierten en uno de los máximos exponentes del arte pop en España. La exposición estará abierta en Espacio de las Artes (Castellana, 82, en Madrid) hasta el 27 de noviembre.
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