La obra social La Caixa ha inaugurado en su espacio de CaixaForum Madrid la exposición “Miquel Barceló 1983-2009, La solitude organisative”. Una muestra que, como ha señalado su comisaria Catherine Lampert, no es una retrospectiva sobre la obra del artista mallorquín sino un intento por explicar y profundizar en la experiencia creativa de uno de los artistas contemporáneos españoles más relevantes en el panorama internacional.

Hace más de 25 años la fundación La Caixa decidió apostar fuerte por Barceló incluyéndolo en la exposición “26 pintores, 13 críticos, panorama de la joven pintura española” celebrada en 1982 y en la que el mallorquín tuvo un éxito muy destacado. Tras este primer encuentro La Caixa ha seguido de cerca la evolución del artista incorporando algunas de sus obras claves a la colección de arte contemporáneo de la Fundación y celebrando, hace  apenas un año, la muestra “El mar de Barceló” en la que se mostraba el proceso creativo de Barceló en la realización de la cúpula de la sede de las Naciones Unidas en Ginebra y ahora con “Miquel Barceló 1983-2009, La solitude  organisative” La Caixa consolida la firme apuesta que hizo por el artista en los años 80.

A través de 180 piezas en cuya selección ha estado directamente implicado el artista y entre las que se incluyen no solo sus obras clave sino también cerámicas, esculturas, dibujos, carteles, libros o cuadernos de viajes personales, la exposición intenta transmitir al visitante el ritmo y la variedad de la trayectoria de Barceló, una trayectoria completamente autodidacta en la que el artista ha puesto a prueba los géneros y sobre todo las técnicas artísticas de una manera tremendamente original.

La implicación personal de Barceló con la exposición ha permitido que el visitante sea recibido por una espectacular escultura situada en el  exterior de CaixaForum, cedida para la ocasión por el propio Barceló. Se trata de “Gran elefante dret”, un inmenso elefante de siete metros de altura realizado en bronce y perteneciente a los últimos trabajos del artista centrados en la representación de mamíferos corpulentos con los que suplanta su propia personalidad.

Tras este impactante recibimiento el visitante podrá adentrase en una exposición organizada en torno a siete áreas bien definida a través de las cuales se abordan las distintas preocupaciones artísticas que ha tenido Barceló a lo largo de su carrera. “El mar, el museo, la biblioteca y el estudio” es la primera de estas áreas y en ella se resume lo que fueron los inicios del artista, unos inicios estrechamente vinculados con el arte conceptual y procesual y en los que Barceló se sumergía en sus lienzos extendiéndolos en el suelo y pintándolos a cuatro patas , en lo que seria el principio de su  proceso evolutivo, ya que como el propio Barceló comenta “al principio acometía mis lienzos como un cuadrúpedo y ahora ya me enfrento a ellos erguido”.

Tras esta primera introducción al “Universo Barceló”, la muestra propone una segunda área bajo el nombre de “Un repertorio de la esperanza humana” y en ella se podrán ver las acuarelas –algunas por primera vez- que realizó a finales de los noventa para ilustrar una edición de la Divina Comedia de Dante.

La tercera área, “Todos estos cuadros pertenecen al mundo terrenal” se adentra de lleno en el Barceló más conocido, con lienzos donde la pintura forma espesas capas matéricas gracias a nuevas mezclas de pigmentos puros, óleos y novedosos agentes aglutinantes y la gama cromática se extiende desde los colores densos y oscuros, pasando por tonos monocromáticos descoloridos y secos, hasta prácticamente imitar la transparencia con frías pinceladas azules y grises. Además esta sección incluye una decena de cerámicas realizadas por el artista en 1996.

“Huir del exceso” es el cuarto bloque temático de la muestra y esta compuesto por varios lienzos de gran formato en los que Barceló, inspirado por un viaje que realizo al Sahara en 1989 , comienza a basar su pintura en agujeros y luz utilizando una gama pálida y monocromática a la que  complementa con diminutas sombras con las que pretende “desintoxicarse del exceso de Occidente”.

La parte más autobiográfica de Barceló se recoge en “Un diario”, en este área de la muestra el visitante podrá observar una especie de inventario de la creación de Barceló durante más de 25 años a través de bocetos, acuarelas y cuadernos de viajes en los que el artista plasma gráficamente las sensaciones vividas en sus distintas estancias en Paris, Farrutx, Mali, etc.…

“Chemin de Lumiere”, la quinta parada de la exposición, recoge la especial relación de Barceló con la oscuridad y la noche, puesto que trabaja habitualmente de noche, en un sala con un montaje escénico impactante en el que se muestran distintas obras realizadas o concebidas en la penumbra, a la luz de la luna o con lámparas de aceite y en las que Barceló parece plasmar la luz que se vislumbra en la profunda oscuridad.

Por último, la muestra termina con “Retratos”, una temática bastante minoritaria en el arte contemporáneo pero que Barceló también trabaja con un estilo que recuerda a los grandes vanguardistas de la primera mitad del siglo XX como Kokoschka. En esta área el visitante podrá observar como el artista retrata a personas queridas y admiradas por él como la historiadora del arte Dore Ashton o sus amigos africanos de Mali y el lienzo que da nombre a la muestra “La solitude organisative”, un autorretrato en el que Barceló se representa como un gorila de aspecto serio sentado en un rincón, una metáfora sobre su aislamiento artístico interior.

Se trata de una exposición puramente presencial, puesto que lo matérico de las obras de Barceló, su inmersión en las tres dimensiones desde la pintura, hace imposible apreciar toda la complejidad de sus trabajos en las fotografías del catálogo, un catálogo que sin embargo al haber sido concebido por el propio artista e incluir sus comentarios personales, será una obra de referencia para adentrarse aun más en el “Universo Barceló”.

Marta de Orbe

“Miquel Barceló 1983-2009, La solitude  organisative”

CaixaForum Madrid

Del 10 de febrero al 13 de Junio

Entrada gratuita.

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