El Museo Arqueológico Regional de la Comunidad de Madrid (MAR), que acaba de cumplir diez años, será ampliado ganando espacio para sus exposiciones temporales y sus actividades de formación e investigación. En total, la superficie útil del museo pasará de 4.272 metros cuadrados a 6.409, ganando un 50% de espacio. El proyecto ha sido posible gracias a un acuerdo entre el Gobierno regional y el Ayuntamiento de Alcalá de Henares por el que este último cederá a la Comunidad el solar de la antigua Comisaría ubicada a las espaldas del museo, mientras que el Gobierno regional acometerá las obras de derribo y construcción. El proyecto fue presentado hoy por la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, y el alcalde alcalaíno, Bartolomé González, en el transcurso del acto de celebración de los diez años del museo.

El MAR está situado en el antiguo Colegio Convento Dominico de la Madre de Dios, en el barrio árabe de Alcalá de Henares. El extremo Sur está ocupado por la Iglesia (donde se aloja la exposición permanente), y los lados Norte y Oeste por sendas crujías en torno al claustro y su patio central, cubierto por una estructura acristalada. Junto al convento se encuentra un edificio en desuso, que hasta el verano de 2008 alojó una Comisaría. El solar tiene 462 metros cuadrados y, una vez derribado el edificio, será empleado para construir la extensión del Museo Arqueológico Regional. Las obras costarán 5,5 millones de euros, y se prevé que los primeros trabajos empiecen en unos meses.

La necesidad de la ampliación obedece al incesante aumento de todas las actividades del museo desde su creación: investigación, restauración, excavaciones arqueológicas, docentes, expositivas, culturales, etcétera. El nuevo edificio permitirá liberar espacio en el actual para ampliar la superficie destinada exposiciones temporales -que ganarán un 46% de espacio, ya que sumarán 176 metros cuadrados a los 389 actuales-. Además, se dotará al museo de un espacio exclusivo para depósito de libros y archivo, y de un área didáctica o taller para niños; se ganará espacio para la zona administrativa, se construirán camerinos para los eventos culturales que aloja el museo, se crearán nuevos almacenes para albergar los restos arqueológicos y se ampliarán talleres de restauración. Desde la apertura del museo hace diez años, más de 400.000 personas han podido conocer la historia de la Comunidad de Madrid, desde la Prehistoria hasta la Revolución Industrial, a través de sus exposiciones.

La muestra ofrece un paseo por el Madrid anterior a la aparición de la Humanidad, y recorre las diversas etapas históricas: a partir del estudio del emblemático yacimiento de Áridos (Arganda del Rey), cuenta cómo vivían los primeros madrileños, el paso de esos grupos de cazadores recolectores a productores y los cambios que sufren esos grupos indígenas tras su romanización. El Madrid medieval, y el advenimiento de la sociedad moderna, con el traslado de la Corte a Madrid en el siglo XVI,
completan el recorrido por la exposición.

Exposiciones temporales
El MAR ha organizado exposiciones temporales que han complementado la oferta de la propia colección permanente. Desde la primera ‘Un Museo para todos’, germen de la actual exposición permanente, hasta la última de todas, ‘El tesoro arqueológico de la Hispanic Society of America’, los visitantes han podido contemplar yacimientos tan espectaculares como los de Ambrona y Torralba (Soria) Carranque (Toledo), Arroyo Culebro (Leganés) o Recópolis (Guadalajara). Asimismo, se ha podido viajar a la Prehistoria de la Región con ‘Bifaces y elefantes. Los primeros pobladores de Madrid’, y se han traspasado las fronteras de la Comunidad con muestras como ‘El Salón Rico de Abd al-Rahman en Madinat Al-Zahrá’, ‘Arte rupestre del Arco mediterráneo de la Península Ibérica’, ‘Aquae Aeternae. Emerita Augusta, una ciudad sobre el río’ o ‘Reflejos de Apolo. Deporte y arqueología en el Mediterráneo antiguo’ o la más reciente ‘Vettones. Pastores y guerreros en la Edad del Hierro’. En esta casa de los arqueólogos que es el MAR se organizan desde su apertura cursos de formación permanente para profesionales. Además, ha sido sede de numerosos encuentros científicos. El propio museo impulsa, además, la realización de excavaciones en la región. Actualmente, dos proyectos se encuentran en marcha: los yacimientos paleolíticos de Pinilla del Valle y el yacimiento carpetano de El Llano de la Horca, en Santorcaz.

Los yacimientos arqueológicos y paleontológicos de Pinilla del Valle se localizan en el río Lozoya. Se trabaja allí para profundizar en la economía del Homo neanderthalensis y desentrañar las claves del comportamiento de los primeros pobladores. Estos yacimientos son los únicos en la Comunidad en los que se han encontrado restos de homínidos (Homo neanderthalensis). El Llano de la Horca es un yacimiento de la Segunda Edad del Hierro que estuvo poblado entre los siglos III y I a. C. por los carpetanos, pueblo prerromano de la Península Ibérica.

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